Este libro es una joya.
✔️ Ameno y fácil de leer. 288 páginas que se pasan en un suspiro. Y sobre todo, es inspirador, altamente inspirador. Lo afirmo con seguridad porque lo he leído y también porque sé que los libros que hablan de historias reales tienen algo magnético.
✔️ En este fantástico libro Buttler nos muestra, a través de ejemplos de personajes conocidos de todos los ámbitos, el papel que desempeña el tiempo en el desarrollo de una persona y de los logros que consigue.
»Lo más probable es que, aunque te consideres un/a triunfador/a, esta parte de tu vida no haya sido más que un “precalentamiento” en comparación con el gran cambio o la contribución extraordinaria que harás en el futuro».
✅ La mayoría de personas renuncian a sus sueños, en algún momento dado, pensando que su momento ya pasó o que ya no tienen edad para conseguirlos. Sin embargo, según el autor, el éxito rara vez surge de la noche a la mañana sino que personas, ideas y proyectos precisan aproximadamente una década de trabajo como mínimo para dar los frutos deseados.
✅ En las páginas de esta recomendada lectura encontrarás motivadores ejemplos de personajes del arte, la política, la cultura o los negocios que alcanzaron sus mejores logros en épocas tardías de su vida:
Ghandi pasó 21 años como abogado en Sudáfrica antes de empezar la vida que todos conocemos hoy día como líder espiritual. El autor de ‘Los cuentos de Canterbury’ (considerado el padre de la literatura inglesa) escribió su obra más celebre entre los 54 y los 61 años. Sam Walton pasó más de 20 años adquiriendo conocimientos sobre venta al por menor antes de abrir, a los 44 años, su primera tienda WALMART. Ruth Hanler ganó a los 43 años el I Premio de la Feria de Juguetes de Nueva York con una muñeca innovadora a la que llamó Barbie, como su hija.
✅ Otros ejemplos de personas que no alcanzaron fama o éxito hasta cumplir los 40 o los 50:
Julia Child, Katherine Graham, Betty Friedan, Max Weber, Thomas de Aquino, Thomas Khun, Christian Dior, Rousseau, Danny Trejo, Samuel L. Jackson y un largo etc. relatados en el libro.
Más ejemplos, aunque no aparecen en el libro, son Ang Lee o José Saramago, Morgan Freeman, Churchill o Verdi . Tony Morrison publicó por primera vez a los 40 años y cumplidos los 60 ya había ganado el Nobel y el Pullitzer. Penélope Fitzgerald, publicó su primer libro casi a los 60 años. George R.R. Martin (Juego de Tronos) publicó. Golda Meir fue la Primer Ministro de Israel desde los 71 años de edad hasta los 76. La escritora española Rosa Regás ganó el Premio Planeta a los 68 años y vio publicada su primera novela a los 58. Katharine Hepburn hizo un musical sobre la vida de Coco Chanel, a los 62 años y ganó su cuarto Oscar a los 74 y siguió haciendo películas casi hasta el final de su vida (96 años). La actriz española María Galiana hizo su primer debút a los 50 años y ganó un goya a los 66.
Y aquí uno de mis ejemplos favoritos: Anna Mary Robertson Moses (Grandma Moses), renombrada artista folclórica estadounidense que comenzó a pintar a los 70 años. Sus pinturas se han estampado en sellos y postales y fue homenajeada por la Casa Blanca por Dwight Eisenhower.
Rara vez es demasiado tarde o se es demasiado mayor para hacer algo grande o verdaderamente significativo, sobre todo, para uno mismo. Nunca es tarde para aprender o desarrollar esa idea que guardamos en un cajón del escritorio o de nuestra cabeza. La juventud no siempre es divino tesoro, la experiencia vital adquirida y la libertad de la madurez sí. Grandes artistas y emprendedores tardíos dan fe de ello. Jane Fonda creó sus libros y videos de ejercicio cuando tenía 46 años y a los 68 fue modelo para una línea de cosméticos. La lista de ejemplos sería inmensa …
✅ A través de la lectura de esta obra recuperas la ilusión, sea cual sea tu edad, para retomar o iniciar todas aquellas cosas que siempre has querido hacer y que siempre postergas pensando que ya no es tiempo de hacerlas. También adquieres paciencia y temple para encarar tus proyectos. Lo considero un recurso sociolaboral en toda regla y de lo más recomendable, por cierto.
Lo recomiendo sin dudar, al igual que recomiendo leer también esta entrada sobre pensamiento a largo plazo que está íntimamente relacionada.
¿Y si en vez de pensar a lo grande, pensamos a largo plazo?
✅ Los filósofos estoicos para eso pueden resultarte de gran ayuda. El estoicismo se ha practicado por reyes, presidentes, artistas, escritores y empresarios a lo largo de la historia y todos lo consideraban como una forma de vida recomendable y satisfactoria. Aplicado a nuestro desarrollo personal y profesional puede convertir nuestro camino de baldosas amarillas en algo muy revelador.
“La creación de marcas es un trabajo lento, paciente y metódico. Lleva décadas convertirse en un éxito de la noche a la mañana” . La humildad es avanzar paso a paso.” (Al Ries)
Y recuerda:
lo importante es avanzar cada paso de ese camino de baldosas amarillas de forma consciente dejando lo mejor de ti, sin obsesionarte con el resultado.
¿Te imaginas llegar a trabajar 84 años en la misma empresa?