El jueves 27 de octubre asistí a la presentación online de la campaña MUJERES DE METAL organizada por VALMETAL.
Me pareció un encuentro realmente interesante, ameno y enriquecedor. No voy a contar nada ya que podéis verlo íntegramente aquí.
Todas y cada una de las intervenciones de las profesionales que participaron fueron valiosas y significativas.
Mujeres intrépidas, curiosas, decididas, comprometidas e inconformistas que decidieron (algunas hace ya décadas), a la hora de prepararse y formarse laboralmente, elegir una especialidad o puesto relacionado con el metal y el sector industrial.
Cuando le preguntaron a Isabel Navarrete, Directora de la empresa valenciana RNSinox, qué consideraba que aportaban las mujeres en sus puestos de trabajo, respondió con la experiencia que le aportan los 25 años que lleva en la empresa familiar:
”Las mujeres aportamos un enfoque distinto: solemos darle más vueltas a las cosas, nuestro enfoque es más crítico, somos algo menos impulsivas y más organizadas.
Esto no quiere decir, que seamos menos resolutivas. Y eso bien trabajado en un equipo mixto, da como resultado una mejora en la gestión con independencia del área o departamento. Aportamos una visión global.
Pienso que contar en los equipos de las empresas y organizaciones con mujeres es altamente enriquecedor y es un valor añadido.”
La mujer en el sector industrial.
Muchos de vosotros recordaréis a la joven soldadora de FLASH DANCE.
Hace 40 años era improbable encontrar a una mujer realizando este trabajo. Ver a Jennifer Beals soldando en un taller rodeada de hombres y metales le daba un toque de glamour y exotismo al oficio. Quizás más de una joven o mujer sintió curiosidad o ganas de probarlo cuando vio la película, pero en aquellos años lo tenían muy difícil, mucho más que hoy día. Exceptuando en períodos de guerra, a la mujer no se le facilitaba en absoluto realizar trabajos en la industria o el metal (serie Bomb Girls).
Justo dos años antes del estreno de la película, en 1981, se había creado en California la Asociación de Mujeres en las Industrias del Metal (AWMI).
De lo que no cabe duda es del poder del cine (del formato audiovisual) para mostrar, motivar, inspirar, impulsar, divulgar …
Lo que no se comunica no existe.
Hoy día, contamos con más herramientas de comunicación que nunca gracias a Internet, los dispositivos digitales, las redes sociales, etc. Gracias a la comunicación digital, por ejemplo, el testimonio de mujeres excepcionales que han dejado huella en el sector metal es accesible en cualquier parte del mundo.
Además, los tiempos han cambiado. Las jóvenes de hoy día son distintas a las de hace 40 años.
Si queremos transmitir un mensaje dirigido a ellas, de forma directa y efectiva, tenemos que hablar su lenguaje y utilizar sus canales de comunicación y entretenimiento.
Niñas y jóvenes necesitan modelos positivos en los que inspirarse. Mujeres como las que han participado en esta campaña que transmitan que no solo es posible, sino que además es muy satisfactorio formarse y trabajar en puestos dentro de un sector como el del metal que hasta hace bien poco era exclusivamente masculino.
Pero hay que adaptar el mensaje al público al que más interesa llegar. Por ejemplo, llegaremos mejor hasta ellas a través de Instagram o Tik Tok que Linkedin y prestarán más atención a un vídeo de manga que cuente la historia de una joven soldadora que grabar un vídeo en una planta de producción.
De lo que se trata es de captar su atención y una vez conseguida despertar su interés mostrarles todo lo positivo de estudiar ciclos formativos, todo lo que ellas pueden lograr y aportar.
La mujer en sectores tradicionalmente masculinos.
Desde hace décadas se están haciendo campañas de sensibilización y divulgación para integrar a las mujeres en sectores históricamente masculinos. Aún recuerdo la campaña para incorporar a la mujer al ejército en nuestro país. Hace 34 años se incorporaron, por primera vez, 26 mujeres a la milicia. Solo el 12,8% de los militares españoles son mujeres, la mayoría de ellas ocupan los escalafones más bajos. Solo dos mujeres han logrado ascender a la cúpula del ejército español en la historia de las Fuerzas Armadas.
Hace poco, el gobierno británico lanzó la campaña ‘Un soldado es un soldado’ para habla de igualdad de sexos y atraer personal femenino. El mensaje incide en que en el ejército a los soldados los definen sus capacidades, no su género. La campaña, se difunde en cines, vídeo bajo demanda, radio y redes sociales. Alcance, sin duda, tendrá. Y ahí está una de las claves: comunicar de forma efectiva para lograr un gran impacto social.
En los sectores industriales, gran cantidad de puestos de trabajo ocupados por mujeres están asociados a la realización de tareas repetitivas de miembros superiores que requieren una destreza manual. Los puestos que requieren aplicar fuerza y manipular elementos pesados suelen ser realizados por hombres.
La fuerza física ya no es un argumento válido para que una mujer no pueda realizar cualquier tarea hoy día ya que la mujer ha aprendido a integrar el mantenimiento físico y el ejercicio en sus rutinas (algo que antes no era habitual o bien visto).
Y así, uno a uno, hay que desmontar todos los prejuicios y estereotipos que existen sobre la mujer en la Industria.
Industria e Igualdad.
Desde hace varios años, el sector metal en nuestro país ha comenzado a dar pasos para trabajar la igualdad.
La empresa metalúrgica Ferros La Pobla, de La Pobla de Vallbona (Valencia) lanzó en 2017 la campaña ‘Mujeres de Hierro’ impulsada por su directora Alexandra Cortés y contando con la colaboración de la asociación ALIA.
El Consejo de la Mujer de la Zona Franca de Barcelona (CZVB) cumplió su 2º aniversario recientemente.
Ahora VALMETAL con su reciente campaña quiere tener un mayor alcance e impacto en la sociedad y en las jóvenes potenciando las acciones divulgativas que ya realiza en centros educativos.
Ya es hora de que la sociedad integre que salimos ganando todos, si las mujeres se incorporan a la totalidad de sectores económicos, de organización y gestión de un país.
Las imágenes vintage utilizadas en esta entrada pertenecen a la University of British Columbia